Los caminos de Sudamérica han sido las venas y arterias que nos han permitido recorrer este continente y conocerlo profundamente. A través de ellos hemos llegado a 83 casas y 80 proyectos educativos diferentes, células de este macroorganismo divisor de océanos.
Unos 45.000 Km entre Santa Marta (Colombia) y Ushuaia (Argentina), Santa Elena (Ecuador) y Florianópolis (Brasil) a lo largo de 365 días, entre el 26 de Julio de 2016 y el 26 de Julio de 2017.
Rodamos por estos caminos de Sudamérica a todas las alturas, unos a nivel del mar y otros a más de 5.000 metros de altitud en los que la Pathfinder apenas podía respirar. Tuvimos que cuidarla y obligarla a descansar en varias ocasiones. Fue nuestra cama y nuestro hogar por muchas noches (unas 80 también) y le debemos mucho.
Los caminos de Sudamérica son de ripio y asfalto, de arena y cemento, de hierba e hielo, de agua y piedras. A sus costados fuimos sembrando familia y amigos, regalando amistad por sus veredas, dejándonos sorprender a cada curva y soñando con cada nueva vuelta de neumáticos.
Nos gusta conducir y descubrir paisajes tras sus cristales oscuros. Cuando uno nos maravillaba, ahí decidíamos parar. Esa libertad ha sido la esencia de un Roadtrip que nunca olvidaremos.
Este pequeño video-post es nuestro particular homenaje a todos los caminos de Sudamérica que nos llevaron finalmente al centro de nosotros mismos, pues en el pequeño espacio que compartimos mientras los recorríamos ocurrió la convivencia íntima de nosotros 5. Ahí dentro hubo roces e histerias, alegrías y descubrimientos, temores y llantos, añoranzas y sorpresas, besos, miradas y palabras.
Muchas palabras.